Es habitual que los clientes que quieren instalar parquet en la vivienda barajen la posibilidad de poner también el parquet en la cocina, una cuestión que ya hemos comentado de pasada otras veces. En el post de hoy veremos las posibilidades según los distintos tipos de suelo y cuál es el más aconsejable.
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Cada vez las cocinas se integran más en las viviendas, se hacen más abiertas formando parte del comedor, y por lo tanto pasan de ser una zona aislada en la que cocinar a ser otra estancia más que integrar con el resto de la vivienda en cuanto a diseño y decoración. Pero hay una cuestión primordial a tener en cuenta, y es que la cocina es una de las zonas denominadas “húmedas” en las que es fácil que caiga agua o haya humedad, además de utensilios que en caso de caída podrían afectar al parquet. Y es entonces cuando surgen las preguntas de cuál dará buen resultado, de si poner el mismo que en el resto del hogar para buscar uniformidad o no, etc.
Parquet de madera
El parquet de madera en la cocina a priori sería el menos aconsejable, principalmente por sus propiedades. Es de sobras sabido que a la madera no le sientan bien las humedades propias de una cocina, el fregado continuo, o el uso de productos de limpieza propios de la cocina como son los anti grasas. Además, dado que la madera es más delicada, su resistencia a golpes típicos de la cocina, como son caída de platos o cubiertos, es baja y el uso cotidiano seguramente dañaría el parquet.
Suelo laminado
Hasta hace unos años el suelo lamiando era una opción arriesgada y las marcas lo desaconsejaban en sus garantias, principalmente debido a que no soportaban bien el fregado continuo, ya que no tenían la resistencia y calidad de hoy en día.
Actualmente los lamiandos han avanzado muchísimo en innovación de materiales y composición, ofreciendo al mercado productos mucho más resistentes a la humedad y haciendo posible la instalación en cocinas, eso sí, con ciertas restricciones en el tiempo de garantía en comparación con el instalado en el resto de la vivienda.
Flint
La marca Flint es especialista en la fabricación de un suelo sintético que soporta perfectamente las condiciones más extremas, como la cocina, pero también en baños, lugares públicos de alto tránsito, oficinas, etc. Es sin duda el mejor parquet en la cocina, pero su precio es elevado acorde con la calidad que ofrece, hecho que hace que algunos clientes se lo piensen un poco más.
La marca Flint, conocedora de este pequeño inconveniente a la hora de decirse por su producto, sacó hace algún tiempo al mercado una nueva gama no tan resistente al agua que se puede instalar en las estancias con condiciones menos exigentes, como comedor o habitaciones, pero que tiene un precio menor, lo que abarata la instalación. Esta nueva gama, llamada Flint Continuum es totalmente compatible con la gama original de Flint, y disponen de los mismos modelos, porque es posible instalar el mismo en toda la vivienda siendo el de la cocina más resistente, pero sin diferencias aparentes.
Suelo vinílico
El suelo vinílico se destaca como una de las mejores opciones en términos de relación calidad-precio y durabilidad para toda la vivienda. En la actualidad, los acabados y las gamas han mejorado significativamente, logrando imitaciones de madera altamente realistas. Este tipo de suelo es completamente resistente a la humedad y posee una gran durabilidad, lo que permite su instalación en la cocina con resultados garantizados.
Como hemos visto en el mercado hay disponibles de diferentes opciones, unas más idóneas que otras, pero todas son posibles siempre y cuando se tenga claro el parquet que hay instalado. Ahí es donde el profesional debe aconsejar según los gustos y necesidades y guiar sobre el mantenimiento del parquet elegido.
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